domingo, 27 de noviembre de 2016
FOTOS DE MI PADRE- SAMUELSON -HUEHUETENANGO
La niñez de mi
padre transcurrió en los amplios terrenos que poseían sus padres en lo que hoy
conoce como EL CALVARIO, zona 3 de Huehuetenango. Al día de hoy todavía se
encuentra una casa donde vivieron situada abajo del Molino"Elvira",
pertenece a una sobrina de mi padre. Decía él que atrás del Molino, estaban las
demás propiedades de sus padres.
En esos
campos tenían muchas vacas, hacían quesos, tomaban leche, sembraban milpa
y frijol, ayotes, chilacayotes, mi abuela Paterna y mis tias hacían pan para
vender. Criaban cerdos y con su carne hacían chorizos, longanizas
butifarras y chicharrones. Mi padre asistió al segundo o
tercer grado de primaria allá por los años de 1925 0 1927.E n ese tiempo era u
lujo leer y escribir. Asistía a la escuela primaria del Terrero, donde su
maestra era su prima hermana Eulalia López Ordoñez. Doña Eulalia López vivíó
despues como jubilada por los años 50s a 80s en la Ciudad Capital.
Muchas historia
escuché a mi padre. Entre ellas que cuando los hermanos mayores iban cumpliendo
su mayoría de edad o quizás un pocom menos. llegaba un encargado a decirle más
o menos a su madre las siguentes palabras. "Señora Leandra, su hijo ya
está enedad para servir en el ejercito.. Todos sus
hermanos fueron a prestar servicio militar a su tiempo. Los primeros por los
años 1918, 1920...Según entiendo el prestó servivio militar por los años
de 1935 a 1937. Narraba mi padre que los mayores al irse iban
dejando el pastoreo de las vacas a los hermanos menores . Ellos
prestaban servicio generalmente en el Fuerte deMatamoros o en
Fuerte de San José. Ambos ubicados en la Capital.
Mi padre prestó
servivio en el Fuerte de San José. Mencionaba mucho la Finca Aceituno. recordaba
anecdotas como por ejemplo el de un copañero que en sus primeros
días fue a tirar su" rancho" al bote d ela basura. Pero que en
el cuartel había un "sargento semana", que con un chicote (azote para caballos) y varios
azotes obligo al recluta que había tirado la comida a sacarla de la basura y
comersela. Contaba que durante un buen tiempo la comida era hecha por los
mismos soldados que sin lavar las verduras y de manera antihigienica hacían u
caldo o lo que sea. Donde les servían el rancho era un lugar lleno de
moscas que los zopilotes se posaban en las mesas viejas donde les
servían. Un día llegó un coronel o alguién de alto rango y al ver las
condiciones en que comían, mando inmeiatamente a contratar mujeres
cocineras y ordenó que les sirvieran mejores alimentos y de encondiciones
aceptables.
Contaba que
padecían de hambre y que los mandaban a cuidar o entrenar en una finca
llamada Aceituno donde habia muchos árboles de jocote, donde de
alguna forma se las ingeniaban para comerlos y así aliviar un poco el hambre.
Cuando finalizaban
su tiempo de servicio. les decían si querían" reengancharse",
ofreciéndoles subirles de grado militar de soldados de segunda, d primera
a cabos, a sargentos. Varios de los compaleros d eus hermanos o de él acetaron
"reengancharse" y siervieron otros años más. Con el correr de los
años fueron ascendidos a capitanes, y luego a coroneles. Recuerdo que
siendo niño en un viaje a la capital, en el mismo transporte iba un señor cuyo
nobre era don Porfirio, del apellido no recuerdo, platicaron muy animadamente.
Luego mi padre me dijó que don Porfirio era Coronel jubilado que vivía en
la Capital. En su juventud don Porfirio se había renganchado en el ejército.
Por su parte sus hermanos y mi padre no quisieron servir más aallá de su tiempo
obligatorio.
Mi padre siempre estuvo orgulloso de haber sido soldado en tiempos del General Jorge
Ubico.Igualmente lo estaba su hermano Olivio, quién habia servido en la artillería, y por eso sus amigos lo conocían como Olivio "El artillero", o" El patojón López"
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