miércoles, 14 de febrero de 2018

"QUIEN ME DIESE...SUZANNE Y LOS MATASANOS-Huehuetenango

"QUIEN ME DIESE...SUZANNE Y LOS MATASANOS-Huehuetenango

 "QUIEN ME DIERA..."
Por AbrahamdeArim
Basado en un hecho real
Un día de cierto año, llegó una señora  a casa de Alberto a hacerle  una tarea de limpieza. La señora  le entregó a nuestro amigo una bolsa conteniendo tres frutas de las llamadas "Matasanos" Parece ser ser que esta fruta de matasano no fue bien aceptada por los españoles cuando llegaron a las tierras de América .Igualmente nuestros bisabuelos y abuelos lo sembraban más como  para marcar los linderos de sus terrenos que por degustar de las frutos. Las frutas maduras caían solas por su peso y se pudrían en el suelo. Tanto animales y aves domesticos como salvajes es probable que las comiesen  al píe del árbol.
Albert, que así le llamaban sus amigos, recibió sin  entusiamo la bolsa con los tres matasanos ya maduros, agradeció a la señora por llevarselos y los colocó sobre una mesa, decidiendo que probaría uno al mediodía.
En ese momento, 10.00 de la mañana- llegó a su mente el rostro de Suzanne, su bella amiga y  recordó que en una plática anterior ella le había comentado que en alguna oportunidad siendo niña había probado la fruta de matasanos en la finca situada en Huehuetenango , propiedad de su abuelito Helmuth. Un alemán de la vieja escuela.. Suzanne del Cielo y Mar, era una bellísima joven  de cabellos castaños dorados, piel blanca, alta,ojos de color azul celeste y una figura escultural
Alberto se dijo a sí mismo;
_Quizás estas frutas le apetezcan a Suzanne. Se la llevaré.Espero que le agraden._
 Al llegar a casa de Suzanne y preguntar por ella, un familiar le dijó que ella había salido a hacer un mandado. Albert le entregó la bolsa con las frutas de matasanos, rogando que entregase la bolsa a Suzann.
Previamente Albert, que tenía un alma soñadora y de poeta, días antes había leído en la Sagrada Escritura de la Bilbia, el pasaje siguiente; "Y David dijo con vehemencia: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén que está junto a la puerta!." 2 Sam. 23.15 Pensando en este verso y su gran significado Alberto tomó papel y pluma y lo escribió en una hoja de p
apel que adjuntó a las frutas.
Después de la entrega, el buen Alberto regresó  a su casa y esperó
A las 7.30  o quizás a las 8.00 de la noche, Albert  tocó la puerta de la casa de Suzanne. Ella misma abrío, invitandole a pasar. Radiante la mirada de sus ojos claros y la faz muy bella.
Susann tenía preparada una cena muy exquisita, pan y chocolate caliente. y seguidamente platicaron.
Ella le dijo que ese día a eso de las 10.00 horas de la mañana, había venido a su mente el deseo de comer un matasano. Por lo mismo había salido a dar una vuelta a preguntar a unas tiendas de cmetibles a buscar dicha fruta. Buscar un matasano en las tiendas es como dice el conocido dicho, como buscar una aguja en un pajar. Ella regresó desanimada a su casa. Sin embargo como buena cristiana que se comunicaba constantemente con Dios, elevÓ una sencilla oracion delante del Padre Eterno y le pidió que si fuera posible le concediese encontrar  la mencionada fruta de algun forma, porque para Dios nada es imposible.
Sin lugar a dudas Dios le concedió su petición, y al regresar a su casa encontró la bolsa en la mesa del comedor.  Al ver que adentro había tres matasanos maduros con su color amarillento, sintió alegría, y algo más aún  al leer la pequeña nota adjunta que decía: Suzanne, comparto contigo el siguiente verso:
 "Y David dijo con vehemencia: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén que está junto a la puerta!." 2 Sam. 23.15

Espero mi amada Suzann que te agraden estos matasanos-

Quien piensa en tí todo el día

 Albert
Suzann preguntó  a su amado, como había hecho  para "adivinarle" el pensamiento. Él le respondió que solamente había acudido a su mente y corazón que deseaba regalarle los matasanos.
Susann y alberto se tomaron de las manos y se abrazaron. Alberto buscó la mirada de su bella Suzanne y se deleitó en los hermosos ojos azul celeste de su princesa. luego aspiro profundamente el aroma que exhalaba los cabellos rubios de Suzanne del Cielo y Mar  para recibir un beso dulce y muy exquisito de los labios de Suzanne del Cielo. Y así abrazado a la escultural figura de Suzanne le dijo:
"Susann, mi bella Susann, mi amada princesa...eres tan bella...tan noble..tan especial"
Matasanos, vosotros que nunca estareís en las estantanterías junto a las uvas, melocotones, higos, dátiles y granadas. Que habeís sido menospreciados y despreciados hasta el cansancio,llegasteis directo al corazón de mi princesa amada, a su dulce boca y paladar y por ello recibí en recompensa los más dulces besos de su boca. Por eso os digo, en vosotros se ha venido a cumplir la palabra que dice:
 2:3 No multipliquéis palabras de grandeza y altanería;
Cesen las palabras arrogantes de vuestra boca; 
Porque el Dios de todo saber es Jehová, 
Y a él toca el pesar las acciones.
2:4 Los arcos de los fuertes fueron quebrados, 
Y los débiles se ciñeron de poder. 
2:5 Los saciados se alquilaron por pan, 
Y los hambrientos dejaron de tener hambre; 
Hasta la estéril ha dado a luz siete, 
Y la que tenía muchos hijos languidece. 
2:6 Jehová mata, y él da vida; 
El hace descender al Seol,
y hace subir.
2:7 Jehová empobrece, y él enriquece; 
Abate,
y enaltece
2:8 El levanta del polvo al pobre, 
Y del muladar exalta al menesteroso, 
Para hacerle sentarse con príncipes y heredar un sitio de honor.

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